Si quieres juzgar la calidad de un sofá, ve más allá de lo que parece por fuera. La calidad de los muebles es más profunda que la apariencia, y es por eso que dos sofás de aspecto idéntico pueden variar tanto en precio. Lo que hay dentro y sobre todo en los cabezales del sofá determinan cómo se califica tu sofá en cuanto a rentabilidad.
Las diferentes partes del sofá: el armazón, el soporte del asiento y el relleno, determinan no solo el nivel de comodidad de tu sofá, sino también su capacidad para mantener su forma y estabilidad en los años venideros. Para determinar la calidad de los muebles, es importante fijarse en los cabezales del sofá.
El tiempo que durará y conservará su forma depende en gran medida del marco, incluyendo los cabezales del sofá, y la calidad de un sofá de alta resistencia siempre tiene uno fuerte y resistente. Al mirar el marco y los cabezales, esto es lo que debes considerar:
El soporte del asiento también es un componente importante para determinar la calidad de un sofá. Funciona en tándem con el marco y el relleno. Un marco resistente proporciona un ancla para un buen soporte del asiento y el relleno lo aumenta. Siempre debes probar la calidad del soporte del asiento sentándote en un sofá antes de comprarlo. No debes ceder, y debes proporcionar un buen soporte en el asiento y en la parte posterior. Las tres opciones de soporte de asiento más comunes son:
La construcción de madera dura como roble secado al horno, haya o fresno es duradera. Es la opción más cara, pero también la mejor inversión. La madera más blanda como el pino es una opción asequible popular, pero puede deformarse o doblarse después de unos años.
Se debe evitar un marco o cabezales del sofá hecho de aglomerado, plástico o metal, ya que probablemente se deformará o agrietará y, en general, es incómodo.
El método en el que se une el marco o los cabezales del sofá en las esquinas es un detalle importante. Los bloques de esquina de madera son uniones de calidad. Evita un sofá que solo esté unido con uñas, grapas o pegamento. Si bien estos elementos a menudo se pueden usar para reforzar un marco o cabezales, no deberían ser la característica principal de la construcción de un sofá.
Los resortes de ocho vías atados a mano son lo mejor de los resortes de sofá: son increíblemente cómodos y duraderos, con un precio que combina. Una opción menos costosa son los resortes serpentinos, que son segmentos pre-ensamblados de alambre retorcido y serpenteante.
La espuma de poliuretano es un relleno de cojín común que es duradero y fácil de cuidar. Pero sé selectivo: la espuma que es demasiado densa puede sentirse dura, y la espuma que es demasiado blanda puede deteriorarse rápidamente con el uso regular.
La espuma firme envuelta en guata de poliéster es una opción económica que también es cómoda. Para un sofá de primera línea, recomendamos una espuma de alta elasticidad (HR) envuelta en un combo de plumas. Es exuberante y duradero. Esto influye enormemente en la calidad de un sofá o la calidad de los muebles en sí.
Un tips adicional, antes de comprar tu sofá es asegurarte de que el mueble pasará por las aberturas y pasillos necesarios en tu hogar. A menudo, las patas serán extraíbles para facilitar el movimiento.